En el 2006, antes de la actual fiebre por Juego de Tronos, la editorial francesa Soleil publicó el primero de los cinco volúmenes previstos de la serie Servitud. Allí el guionista Fabrice David y el dibujante Éric Bourgier, aunque utilizaron como punto de partida las obras de autores como R.R. Martin o Tolkien, presentaron un universo propio y mostraron a los lectores de todo el mundo una de las series de fantasía épica más interesantes del momento. Hasta tal punto que en poco tiempo se convirtió en una obra de referencia para los seguidores de la fantasía heroica.
Fabrice David, acompañado por los excepcionales lápices de Eric Bourgier presentó en aquella primera entrega a Kiriel, el maestro de armas del rey Garantiel y a Lerín, la hija del anciano monarca. A causa de la endogamia, la dinastía real sufre un evidente debilitamiento, es por eso que el rey favorece una boda entre su hija y el joven Kiriel. Pero, no podía ser de otra forma, el reino es un caldo de cultivo para las intrigas palaciegas, revueltas internas y todo tipo de escaramuzas, conjuras políticas y traiciones en la sombra. En aquella ocasión también conocimos la historia de la estirpe de los gigantes y sus enemigos, los terribles drekkars. Estos también eran descendientes de los gigantes, pero se alejaron de sus hermanos y se unieron a los dragones.
La segunda entrega de la serie llevaba por título Drekkars y fue toda una declaración de intenciones por parte de sus autores. Fabrice David y Eric Bourgier se centran en esta ocasión en el origen de los servidores de los dragones, los drekkars, una sociedad sin apenas contacto con el exterior. En Drekkars se detallan sus clases sociales, sus motivaciones y las disputas en su seno que llevan camino a una guerra interna entre los que quieren crear una nueva sociedad y los que quieren mantener el status quo establecido. Un álbum en el que su guionista añade nuevas piezas al rompecabezas. Dejando pistas sobre las motivaciones del misterioso personaje que quiere provocar la guerra entre los drekkars y el rey Garantiel.
La esperada continuación de esta épica serie se puso a la venta hace menos de un mes. El adiós a los reyeses el tercer volumen de la saga, y el último aparecido hasta la fecha en Francia. Repite el equipo creativo, pero destaca sobremanera el dibujante Eric Bourgier quien realiza su mejor trabajo hasta el momento, mostrando un completo dominio del trazo y recreando con todo lujo de detalle todo un mundo medieval. El adiós a los reyes se sitúa mil años después del segundo tomo, en él seremos testigos de la desaparición de los gigantes. Mientras, los dragones esperan su momento tras las montañas; las sirenas descansan en el fondo de los océanos; y los ángeles y hadas no son más que mitos de la gente sin esperanza. Es el fin del tiempo de los poderosos y una nueva edad se acerca... la era de la Servitud eterna.
Sus autores:
David Fabrice es un apasionado de la literatura, la historia y la ciencia ficción. Su primer contacto con la industria del cómic fue con Live War Heroes publicado por la editorial Soleil. Allí coincide por primera vez con el dibujante Eric Bourgier en el que también sería su debut profesional. Además de guionizar Servitud, Frabrice ha trabajado para Soleil en Dossier tueurs en série, Zodiac Killers (2008), Les Voies du Seigneur (2009), La Croisade des Enfants (2009), Bravesland (2009), Carthage (2010) y Le Crépuscule de Tellure (2011).
Eric Bourgier (Saint-Etienne, Francia. 1975) debutó con Live war héroes (2003), un cómic futurista de la editorial Soleil y en donde coincidió por primera vez con el guionista Fabrice David. Su segunda obra, también de la mano de Soleil, fue el álbum sobre la Primera Guerra Mundial Paroles de Poilus (Soleil). En sus obras, Bourgier presenta un trazo realista, de estilo clásico, rico en detalles. Un dibujante extraordinario que tiene un dominio absoluto de la figura humana. El autor perfecto para crear un universo desde cero y dotarlo de vida y credibilidad.
Tomás Pardo
20 de agost de 2012