Hay pocas obras capaces de contagiar tanto optimismo y frescura, pocos personajes tan atrayentes, y a la vez tan cercanos. The Rocketeer no solo ha logrado sobrevivir al tiempo, sino que ya está considerada como serie de culto y sigue influenciando a los nuevos lectores. En The Rocketeer: Las historias completas, la recopilación que por primera vez edita Norma Editorial en nuestro país, se incluyen las aventuras íntegras del hombre bala, junto a una extensa galería de extras con ilustraciones, bocetos y anotaciones del creador.
En 1982, nació Cliff Secord, un joven aviador de espíritu rebelde y cuya única ambición en la vida es dar todos los caprichos a su explosiva novia Betty, para que no lo abandone por cualquier magnate de Hollywood. Cautivado por la estética de la primera aviación de los años 30 y series cliff-hanging; y rindiendo homenaje a personajes pulp como The Shadow y Dog Savage, Dave Stevens dio vida a una de las primeras grandes creaciones del cómic americano independiente, un superhéroe accidentado, guiado solo por la intuición, y alejado de los arquetipos.
En sus detalladas investigaciones previas a la concepción de cada número, Stevens se reencontró también con la estética de las pinups, macizas jovencitas que conducían avionetas y cohetes, con tanto acierto que The Rocketeer fue el desencadenante de un resurgimiento de la moda pinup en los años ochenta. Betty Page, que por entonces rondaba la setentena, vio cómo su imagen volvía inesperadamente a portadas y series de la época, y revivía en la figura de Betty, el personaje femenino.
Cuando Secord encuentra por casualidad una mochila capaz de elevarle a propulsión a la velocidad del rayo, no se le ocurre utilizar el invento para salvar la humanidad o hacer el bien, sino para reconquistar a su novia, que le culpa por no ser capaz de proporcionarle la vida glamourosa para la que ella está hecha. Pero las cosas no van a ser tan fáciles para Secord. A un ritmo de acción frenético pero que no deja de lado la trama y un gran sentido del humor, The Rocketeer se ve involucrado en una lucha contra la mafia y hasta con los mismísimos nazis para hacerse con la mochila supersónica. ¿Sucumbirá el joven Cliff a las presiones o volverá a colocarse el casco y las botas de aviador para volar más alto que nadie?
Las primeras historias de The Rocketeer aparecieron en Pacific Comics, para luego continuar en Rocketeer Adventure Magazine en 1988 y 1989. La editorial Comico entró en bancarrota, y finalmente fueron publicados tres números de seis pensados en un inicio, el último de ellos con Dark Horse en 1995.
La gran calidad de la obra de Stevens contrasta con una producción escasa. Cuando The Rocketeer reunió un sólido público, las editoriales pidieron entregas más ajustadas al autor, que no quiso abandonar los trabajos habituales que le habían proporcionado el sustento hasta entonces. Stevens, además, confesaba altibajos creativos, y aunque disfrutaba con los bocetos y la concepción de los personajes, le frustraban las largas horas de trabajo en los detalles y perspectivas, en los que no cesaba hasta alcanzar la perfección.
Tras la publicación de The Rocketeer, Stevens vio en 1991 cómo su personaje cobraba vida en la gran pantalla bajo la tutela de Joe Johnston (que luego dirigiría en 2011 Capitán América), y continuó trabajando como ilustrador y en encargos comerciales. Aunque debido a su temprana muerte no pudo participar en la reedición de su obra, el autor había elegido personalmente a la colorista Laura Martin (Planetary), y el volumen contó con la supervisión de sus descendientes.
26 de desembre de 2011