Martin Quenehen y Bastien Vivès reviven al héroe de Hugo Pratt en una nueva aventura ambientada en los convulsos primeros años del siglo XXI
Corto Maltés, el inmortal héroe del cómic de aventuras concebido por Hugo Pratt, regresa a los anaqueles de novedades con La reina de Babilonia. Una nueva entrega que acaba de ver la luz de la mano de NORMA Editorial gracias al buen hacer de Martin Quenehen y Bastien Vivès, quienes ya bucearan en el mundo de Pratt con Corto Maltés. Océano negro, publicado por la misma editorial.
Cabe recordar que el carismático protagonista, nacido en La Valetta de madre gitana y padre marino de Cornualles, había permanecido en un limbo de dos décadas tras la muerte de su creador hasta que el tándem formado por los españoles Juan Díaz Canales y Rubén Pellejero decidió darle una nueva vida em 2015 con Bajo el sol de medianoche, al que siguieron Equatoria y El día de Tarowean. Más tarde el guionista Martin Quenehen y el dibujante Bastien Vivès, conocidos por su trabajo en la novela gráfica Catorce de julio, firmaron el mencionado Océano negro, donde el personaje se zambullía de lleno en el siglo XXI. Cabe destacar la trayectoria de Vivès que, pese a su juventud, ya ha cosechado diversos éxitos y galardones gracias a su talento con los lápices.
La reina de Babilonia también se enmarca en esos primeros años de la centuria, en concreto 2002, donde el lector encontrará a Corto a bordo de un yate amarrado en Venecia, confundido entre los invitados de una fiesta de alta sociedad. Allí se dan cita traficantes serbios, espías croatas y servicios de seguridad iraquíes, como una transición entre los distintos conflictos que bañaron de sangre distintos puntos del planeta antes y después de los atentados del 11-S que demolieron las Torres Gemelas de Nueva York. A ellos van a sumarse piratas, terroristas y agentes de la CIA en una peripecia que llevará al héroe de la Bagdad de Sadam a la costa balcánica, del Sarajevo que restaña sus heridas de guerra a las calles de Estambul. Y ese Corto Maltés renovado y al mismo tiempo extremadamente respetuoso con el original hugoprattiano, que refleja en la melancolía de su alma el tiempo convulso que le ha tocado vivir, acompañado por un personaje femenino tan memorable como Semira.
Como dice en el colofón del volumen Jean Hatzfeld, periodista y escritor francés, corresponsal de guerra en Bosnia y Herzegovina en los años 90, “La guerra es un momento en el que el mundo deja de ser como era, abundante en esperas y vacilaciones, propicio a encuentros extraordinarios, rico en amistad. Lo contrario de la posguerra, cargada de odio amargo. De los infiernos se puede volver maltrecho, pero también infinitamente más filosófico y escéptico, y tomarse tiempo para meditar sobre todo eso en un barco que te lleva a otro puerto”.
19 de juny de 2024