Hace años irrumpió en nuestros veranos una historia que maravilló al mundo del tebeo. Un cómic que, a priori, con una premisa sencilla, inundó las estanterías de todas las librerías con sensibilidad, frescura, buen rollo y en definitiva, el verano hecho viñetas.
Los artífices de tal hazaña veraniega fueron nuestros archiconocidos Zidrou y Jordi Lafebre. Bajo el título de Los buenos veranos nos presentaron a la familia Faldérault y nos invitaron, a lo largo de los cinco primeros tomos de la colección, a viajar junto a ellos en sus diferentes aventuras veraniegas, subidos a su 4L de color rojo.
Hemos tenido la oportunidad de conocer a sus miembros, sumergirnos de lleno en sus vidas y conocer sus problemas, sus sueños, sus amores y desamores y, en definitiva, a través de esta ventana al mundo que es el cómic, descubrir como vive el verano una familia, que podría bien ser la nuestra o la de cualquier amigo nuestro. Toca esta vez, dar la bienvenida al verano, como ya viene siendo tradición, con el sexto tomo de la saga.
En esta nueva aventura viajaremos a 1972, donde los Faldérault buscarán un remanso de paz a orillas del Mediterráneo. Pero como siempre…cuando todo parece que va como la seda, una inoportuna avería les hará parar en una granja regentada por dos encantadoras mujeres.
No te pierdas esta nueva entrega de la que es, sin duda, la serie del verano. Y si fuera el caso de que todavía no has tenido la suerte de descubrir a los Faldérault, no dudes en empezar el verano siguiendo las andanzas de esta simpática familia.
1 de juliol de 2022
